Esta villa está ubicada en una gran parcela de tierra, en una maravillosa isla de las Azores con una magnífica vista al mar.
El proyecto se caracteriza por una gran horizontalidad de la composición volumétrica, intención que se subraya por el hecho de que toda la casa se desarrolla en una sola planta.
La implantación de la casa crea una sucesión de espacios de ocio al aire libre, con características particulares.
La volumetría sencilla pero variada crea una sucesión de llenos y vacíos, generando sombras, que asociadas a las transparencias y al uso de materiales naturales, se ajustan a una efectiva integración paisajística.
Una espacialidad interior muy rica, con una relación franca y variada con el exterior.
Un lenguaje contemporáneo, con un cuidado juego de transparencias, llenos y vacíos, luces y sombras, encarna un amplio programa funcional con espacios generosos.